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miércoles, 2 de junio de 2010

Home, sweet home


Tus miles de folios mezclados con los míos, sobre aquella mesa camilla. Un mueble perfecto en el decorado de nuestro teatro: voces aviejadas, estridentes que iban detrás de alguna perrería de niño revoltoso; griterío y móviles con música pubertosa-regetonera abajo, en el portal; ruedas de un carro de compra cargado de más; cierres de tiendas de barrio; el 500 apurando sus dos últimas horas de servicio... Ese ruido suyo, tan suyo, que le anunciaba cuando aparecía, casi por sorpresa, por Galiana... inconfundible... y correr, correr, correr... hasta la "rotonda", giro a la izquierda, y desapareciendo....

Los gritos del "Pasapalabra" eran sucedidos por los del telediario. Buenas noches....

Era momento al que dábamos privilegio por encima de todo.
Ana, bolsa de pan en la mano; manos y sonrisa encallecidas, llegaba del trabajo.
Rober, con un nuevo record de "hombre-que-nunca-duerme" , entraba por la puerta grande con sus planos. Si había suerte, arroz de Chelo. Comida de la abuela Manuela...
Y tú y yo, una vez más, ¿de la facultad? Jajajaja. No... Sólo los veíamos entrar; sentarse y preparar el ritual. El mismo cada vez que se daban momentos así.

Y era como si la risa se apropiara de nosotros. Y tras alucinar... Paz, quietud; todo falso.
Había nervios a flor de piel, pero siempre pudo más la almohada que la fuerza de voluntad.
Bromeábamos con todo, antes de la cena. Y en el descuento que se abría entre fregar los platos y la siesta condenada a 8horas de cama, iba acomodándose una modorra, un no sé qué... Un regazo se asentaba en torno a la mesita de café. E, irremediablemente, caíamos rendidos...

Se agradecía el airecillo de entre los árboles; refrescaba la pieza y se iba colando hasta casi la cocina. En fin, hacía más ameno aquellos apartes apelotonados: El tragaluz ; Don Gil ; la poesía vanguardista de César Vallejo; La señorita de Trevelez ; la puerta, los goznes, el espacio vacío, el urbanismo en Madrid; La vida es sueño ; .... Sí, la vida era sueño entonces. Eran sueños artificiales, alterados. Era la calada viciosa y apresurada hacia un futuro que ¿qué importaba en ese"ahora"?
Os vi muchas veces iros a dormir, deambular chocando con las paredes. Pero siempre había un último documental que compartir; una próxima publicidad que daría paso a la soledad en el salón... Y luego, libros, planos, el portátil,... Y yo. Si iba a la cocina, al baño, me paraba un momento y podía escuchar la respiración fuerte de Ana.

Solía esperar hasta las 5:30 - 6:00 am; hora en la que empezaba a nacer todo, otra vez, a través del balcón. Paseos, paseos, más paseos. La repetición del múltiple "último cigarro". Pulmones y mente saturados. Y siempre la misma frase resonando en la cabeza....
"Ambiguas horas que mezclan al borracho y al madrugador"...
Y al que no duerme; al que no puede dormir porque busca respuestas en un diálogo del siglo XVII; en la correción del examen de mañana; en el aplazo de decisión de septiembre.
Pero, en fin. Otra noche más. O menos...
7:15am. Se van a levantar.
Café en la máquina. Tazas con azúcar y cucharilla. Cisterna sempiterna sonando tras la puerta que va a dar a la oscuridad; y el reposo de tu almohada.

Y detrás, una noche más de estudio. ¿Sirvió para algo? Quién sabe... Ya sólo había ganas de dormir. Y olvidar....

Chechus... Home, sweet home...


6 comentarios:

  1. que sentimental te pones cuando quieres, jodia!

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  2. Qué acumulamiento de vivencias que expresas hoy en tu escrito, parece como un vivir rápido, una mezcla de vivencias de varias personas, en todo caso es interesante de leer. Me gusta el cuadro que lo acompaña, pero no sé de quién es. Saludos afectuosos.

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  3. ufff no sabes judith las cosas estan bastante chungatronas de hecho te propongo un juego (esque ahora tengo tiempo) escribe un post que intente reflejar la situación y ambiente de crisis actual en Clermont yo haré lo mismo con Móstoles, y le diremos a ana y elena que hagan lo mismo, a ver de qué forma vemos cada uno la situación ¿te interesa?

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  4. Horas de café y libros y cigarrillo y balcón. Y soledad y, como bien dices, saturación de pulmones y de mente.
    ¡Qué bien describes el entorno! Con colores planos y líneas firmes, como en los cuadros de Cézanne. Y esa tristeza vaga de desilusión (aun siendo tan joven) que lo envuelve todo...
    Y las descripción de esas horas extrañas en que se mezcla quien va y quien viene, la luz que empieza y la que se deshace. Ese momento en que el corazón de los que duerme se ralentiza antes de que todo comience de nuevo.
    Y la literatura de por medio...
    ¿Así que te llamas Judith? Me gusta.
    Un abrazo.

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  5. Bueno, bueno... qué grande!
    El tú de ese "tú y yo" que no iban a clase y veían que el resto del mundo trabajaba, proyectaba, simplemente continuaba el transcurso del día, era yo. Y tú...
    Nosotras, limitándonos a permanecer en las eternas 4.05, "nos vamos o nos quedamos?" así hasta las 4.05 del día siguiente

    Gracias Chech por estos cachitos de vida para la posteridad... -¿los blogs se borrarán algún día? Digo yo que si no se utilizan, se atrofian, como todo. Tenemos que hacer un volúmen con nuestras entradas, por si acaso... venga te ponemos de directora, a lo I. Bosque - .

    Rober nos ha dicho esta mañana: "Judith y yo hemos tenido una idea, hablar de la crisis!!"

    Al momento, Aneto y yo nos miramos, "La idea ha sido tuya"... Efectiviwonder!! Si es que ya se sabe de qué pie cojea cada uno. Pero venga, por mí sí. A ver quién se arranca primero...

    Oye, lo de "sempiterno" muy decadente, muy azoriniano... Ayyyyyyyyyy

    Tienes mil fans ya. A ver si entre ellos hay un cazatalentos que te resuelve la vida y nos olvidamos ya de la filología, que nos va a matar! (Acabo de tener un dejà vu)

    Besitos!

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  6. Qué difícil es hacer aquello que debes y te lanzan "quilos y quilos" del polvo del sueño.Pues si, "chech" las cosas nunca cambian, ni cambiarán.
    je t'aime

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